Granola Premium de semillas

 

Nuestra Granola Premium es un alimento de excelente calidad elaborado artesanalmente a base de semillas de amaranto, calabaza girasol, linaza, ajonjolí blanco y negro, chía, hojuelas de quinua, avena y cebada, y una exquisita mezcla de frutos secos y deshidratados como nueces, arándanos, almendras, uvas pasas y coco rallado, endulzada con miel de abejas pura. Algunos ingredientes de la Granola Premium tienen un horneado y tostado por separado, mínimo y a baja temperatura, y otros se mezclan crudos, para que no se pierdan sus propiedades nutricionales.

 

La Granola Premium Orgánicamente proporciona una fuente de aminoácidos (proteína), ácidos grasos esenciales (Omega 3 y 6), vitaminas, minerales y fibra, que contribuyen al aumento de energía, la prevención de enfermedades cardiovasculares, y el control de los niveles de colesterol y triglicéridos.

 

Además produce antioxidantes naturales que evitan el envejecimiento de las células y posteriores enfermedades como el cáncer. Tiene innumerables propiedades medicinales, sanadoras y energéticas para el organismo.

 

Consume 3 cucharadas de Granola Premium al día en tus desayunos, con yogurt, leche, avena, fruta, o sola como snack, y experimenta una manera deliciosa de consumir semillas!

 

Si de las semillas germinan plantas y árboles multiplicadores de vida, imagina que puede germinar dentro de ti…

Presentación:

Caja de cartón con bolsa interna biodegradable. Peso 400 gramos.

 

Conoce las propiedades de cada uno de los ingredientes de esta exquisita granola:

 

  • Quinua

    La quinua es un pseudocereal, ya que es un grano parecido a otros cereales y con alto contenido en almidón, pero en realidad corresponde a la familia de la espinaca, la remolacha y la acelga. Contiene los 20 aminoácidos (incluyendo los 10 esenciales), especialmente la Lisina, fundamental para el desarrollo de las células del cerebro, y los procesos de memorización y aprendizaje.

    Su proteína es de alta calidad, y además es una fuente de almidón, fibra, minerales y vitaminas, especialmente A, C, D, B1, B2, B6 ácido fólico, niacina, calcio, hierro y fósforo. La quinua no contiene colesterol ni gluten. Es considerada por la FAO como el “superalimento”, lo que llevó a declarar el año 2013 como el año internacional de la Quinua.

  • Amaranto

    El amaranto también es un pseudocereal, y al igual que la quinua, fue seleccionado por la NASA para alimentar a los astronautas en el espacio, por su alto valor nutritivo, por su aprovechamiento integral, por la brevedad de su ciclo de cultivo y por su capacidad de crecer en condiciones adversas. El grano de amaranto posee aproximadamente un 16% de proteína, un porcentaje más alto que el de los cereales tradicionales: el maíz 9,33%; el arroz 8,77% y el trigo 14,84%.

    Además tiene un excelente balance de aminoácidos esenciales. Tiene un contenido importante de lisina, escaso en otros cereales, necesario para la construcción de todas las proteínas en el organismo, lo que lo hace ideal para niños y mujeres en etapa de gestación y amamantamiento.

    Según la FAO y la OMS, sobre un valor proteico ideal de 100, el amaranto posee 75, la leche vacuna 72, la soya 68, el trigo 60 y el maíz 44. Además, la digestibilidad de su grano es del 93%.

  • Girasol

    La semilla de girasol contiene hasta un 58% de aceite rico en ácidos grasos esenciales que ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Posee un alto contenido en potasio, fósforo y magnesio, lo que garantiza un buen funcionamiento cerebral.

    Por su alto contenido en vitamina E, se recomienda consumir semillas de girasol para nutrir la piel y ayudar en los procesos inflamatorios como en la enfermedad fibroquística, común en mujeres jóvenes. Además tienen un alto contenido en Calcio, por lo que es ideal para deportistas, niños, mujeres embarazadas y personas con descalcificación u osteoporosis.

  • Linaza

    Las semillas de linaza provienen de la planta de lino, y dentro de sus propiedades se resalta su efecto diurético, ayudando a los riñones a eliminar el exceso de líquidos y toxinas a través de la orina. Su alto contenido de fibra y la calidad de su contenido graso ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre. Además reduce la tensión arterial por su alto contenido en prostaglandinas (ácido prostanóico) y ácidos grasos omega 3.

  • Calabaza

    Las semillas de calabaza son una buena fuente de proteínas, grasas insaturadas, vitaminas, minerales y compuestos bioactivos, que en conjunto brindan diversos beneficios a la salud. Son ricas en magnesio y ácidos grasos comúnmente conocidos como omega 3, además de tener fibra, que benefician la salud cardiovascular, disminuyendo la presión alta, y ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y controlar el nivel de glucosa en sangre.

  • Ajonjolí blanco y negro

    El ajonjolí blanco es uno de los alimentos vegetales más concentrados de calcio, ya que por cada 100 gr. de ajonjolí existen 975 mg. de calcio, por lo que puede combatir enfermedades como la osteoporosis, y se recomienda su consumo en mujeres en estado de embarazo. Contiene otros minerales como el hierro y el zinc, que participan en el metabolismo de hidratos de carbono, grasas y proteínas. Posee antioxidantes naturales como sesamina y sesamolina, que protegen el organismo de la formación de radicales libres, responsables del envejecimiento celular.

    Su consumo frecuente regula los niveles de colesterol y previene enfermedades cardiovasculares. Por su alto contenido de fibra, también es un buen regulador de la flora intestinal, y se considera revitalizante, por su concentración de vitamina E.

    Por su parte el ajonjolí negro contiene lecitinas y grasas insaturadas que contribuyen a regular el colesterol, normalizando el LDL (colesterol malo) que comúnmente es el que obstruye las arterias. Tiene poderosos efectos antioxidantes por su alto contenido de calcio y zinc, logrando con ello corregir la osteoporosis, y prevenir la aparición de radicales libres

    El ajonjolí negro también regula el funcionamiento hormonal, ampliando la vida útil del espermatozoide, por lo que se puede catalogar como un repotenciador de la fertilidad y de la actividad sexual. Además su alto contenido en metionina, incrementa la lucidez mental, debido a que ese aminoácido esencial  nutre al cerebro.

  • Chía

    Las semillas de chía o salvia hispánica representan la fuente vegetal con más alta concentración de omega 3. Poseen un 33% de aceite, del cual el ácido alfalinoléico (omega 3) representa el 62% y el linoléico (omega 6) el 20%. La chía es el cultivo con mayor porcentaje de ácidos grasos escenciales (AGE) al tener el 82% de sus lípidos con dicha característica. Además de ácidos grasos esenciales, las semillas de Chía poseen una importante cantidad de antioxidantes,  especialmente, flavonoides cuya función principal es eliminar los radicales libres que se producen como resultado de la oxidación celular.

    La chía contiene 23% de proteína, por lo que ayuda a construir y regenerar músculos y tejidos. También su alto contenido de fibra, regula el nivel de azúcar en la sangre y ayuda a reducir el colesterol.

  • Nuez del Brasil

    Las nueces del Brasil son ricas en proteínas (14,3%), vitamina E y en minerales (fósforo, magnesio, calcio y hierro). Son los frutos secos que más contienen selenio, un mineral antioxidante que ayuda a prevenir el cáncer y el envejecimiento prematuro de las células. Su propiedad dietética más importante es su elevado contenido en vitamina B1, superando a la carne, la leche y los huevos. Solo el germen de trigo, la levadura de cerveza, las semillas de girasol y los piñones, contienen más vitamina B1 que las nueces del Brasil.

    Esto las hace muy recomendables en caso de trastornos nerviosos, como irritabilidad, ayuda depresión, pérdida de memoria y falta de concentración o rendimiento intelectual.

  • Almendras

    Las almendras son una buena fuente de proteínas y fibra dietética, son ricas en vitamina E y su contenido de grasas es monoinsaturado casi en su totalidad. Esto las convierte en un alimento excelente para combatir las enfermedades cardiovasculares y reducir los niveles de colesterol en la sangre.  También son altas en antioxidantes que pueden proteger a las células del daño oxidativo, gran contribuyente al envejecimiento y a varias enfermedades

    Las almendras tienen un altísimo contenido de magnesio, un mineral que la mayoría de las personas no incorpora en cantidad suficiente. Una ingesta adecuada de magnesio podría servir para combatir tanto el síndrome metabólico como la diabetes tipo 2.

  • Arándano rojo deshidratado

    El arándano es un fruto pequeño de color rojo, parecido a la cereza y a la uva. Pero a diferencia de su tamaño, sus beneficios a la salud son grandes. El arándano aporta nutrientes como vitamina C y calcio, y es una de las frutas con mayor contenido de antioxidantes, por lo que su consumo protege las células del cuerpo, aumenta los niveles de colesterol “bueno” de la sangre, mejora la circulación, reduce la inflamación cardiovascular y evita la obstrucción de las arterias.

    Además el arándano posee proantocianidinas, sustancias con función anti adherente en el organismo, que hace que las bacterias dañinas para nuestro organismo no se adhieran a las paredes del aparato gastrointestinal, evitando su proliferación y por lo tanto el daño a nuestro cuerpo, tanto al aparato digestivo, como a las vías urinarias.

  • Coco rallado

    El coco es un delicioso fruto que provee nutrientes básicos, entre ellos se encuentran: el calcio, potasio, fósforo, magnesio, vitamina E, Vitamina C, ácido fólico y fibra, ayudando a reducir el colesterol, controlar el azúcar en la sangre y prevenir el estreñimiento.

  • Avena

    La avena es uno de los cereales más ricos en proteínas, grasas (casi el doble que el trigo), hidratos de carbono, vitamina B1 o tiamina (necesaria para el buen funcionamiento del sistema nervioso) y, en menor proporción, aporta otras vitaminas del grupo B. Así mismo contiene minerales como fósforo, potasio, magnesio, calcio y hierro, estos dos últimos se asimilan mejor que los procedentes de alimentos de origen animal por parte de nuestro organismo.

  • Cebada

    La cebada es el cereal mejor dotado de fibra (17%) y sobre todo en materia de fibra soluble (beta glucanos). Esta fibra retarda el índice de absorción de la glucosa y reduce la absorción de colesterol. Además la cebada posee otras sustancias benéficas, como los lignanos, antioxidantes y protectoras del cáncer. Algunas propiedades de la cebada: emoliente, reconstituyente, digestiva, diurética, desintoxicante, tónica, ligeramente vaso constrictora, anti inflamatoria, laxante, alcalinizante, antiséptica, mineralizante y galactagoga (incrementa la producción láctea).

    La cebada también estimula el sistema neurovegetativo, siendo aconsejado como tónico nervioso y cardíaco. Útil tanto para el trabajo físico, como para la tarea intelectual.